El hueso es un tejido vivo compuesto de colágeno e hidroxiapatita. El tejido óseo no es estático, está en un equilibrio dinámico: la producción de colágeno y minerales siempre va acompañada de su descomposición. A medida que envejecemos, la producción de nuevo colágeno y minerales no puede mantenerse al día con su descomposición, lo que conduce a una disminución de la densidad ósea y a veces incluso a la porosidad. La osteoporosis (Baja densidad ósea) es una enfermedad que afecta a muchas personas en todo el mundo, especialmente a los ancianos, cuyos huesos se vuelven débiles y quebradizos.
El uso de gelatina hidrolizada o péptidos de colágeno para tratar la osteoporosis es un enfoque nuevo. Estudios recientes han demostrado que los péptidos por debajo de 3000 DA pueden ser absorbidos directamente por el tracto digestivo y acumularse cerca del hueso para estimular la regeneración de las células óseas. En comparación con los métodos tradicionales, no solo permite que los huesos absorban más calcio, sino que también aumenta su contenido de colágeno, lo que endurece el hueso y mejora su elasticidad para resistir las fracturas.
En un estudio, las mujeres posmenopáusicas consumieron un suplemento diario que contenía 5 gramos de péptidos de colágeno, 500 mg de calcio y 200 UI de vitamina D durante 12 meses. El grupo que tomó péptidos de colágeno experimentó una pérdida significativamente menor de densidad ósea en comparación con las mujeres tratadas solo con calcio y vitamina D.
En comparación con la terapia tradicional de tomar hormonas, calcio y vitamina D, prácticamente no hubo efectos secundarios por tomar colágeno, calcio y vitamina D. La ingestión a largo plazo de colágeno tiene beneficios adicionales: puede hacer que la piel parezca más joven con menos arrugas; hace que el cabello esté más brillante y promueve el crecimiento del cartílago de las articulaciones para aliviar la artritis.